miércoles, 28 de junio de 2017

Plaza de San Juan de Dios

Placa conmemorativa Cristóbal Colón

Plaza de San Juan de Dios

Leía estos días atrás la prensa local y celebraban lo bien  que ha estado la fiesta del Corpus en la ciudad, con mucho calor pero con muy buen ambiente de público. Dentro de las fotos publicadas se me vino a la vista una donde colocaban unos toldos estrenados para la ocasión en el Plaza de San Juan de Dios.

Me vino a la memoria que en cierta ocasión me contó mi madre, que un año los miembros de las Fuerzas Armadas tuvieron que hacer uso de sus armas reglamentarias, para tirotear a  los toldos instalados, ya que la cantidad de agua de lluvia caída impedía que estos se vaciaran completamente  y ante el peligro inminente de derrumbe optaron por esta solución.

Una mirada a esta plaza nunca viene malamente y si es para recordar tiempos antiguos mucho mejor.

La presión ejercida por los arrabales cercanos consiguieron la desaparición de esta pequeña lengua de mar que unía poniente con levante, el relleno en las plazas de Santiago y San Juan de Dios no se hicieron esperar mucho, después fue cuestión de urbanizarlos.

La plaza que nos ocupa tomó primero el nombre de Corredera, mas tarde cambió de nombre en varias ocasiones según el color del gobierno que teníamos, vamos como ahora, pero fue tomando forma con la construcción del Consistorio, la iglesia, hospital, mercado y la muralla que separaría definitivamente el mar de la Plaza de San Juan de Dios.

Más tarde esta plaza sirvió para todo tipo de actos públicos, corridas de toros, ejecuciones, fiestas, reuniones y todo lo que tuviera carácter público, historiadores de época más recientes creen que la plaza no fue investigada convenientemente por sus colegas de aquella época.

Adolfo de Castro en su libro “Nombres antiguos de calles y plazas de Cádiz” año 1857, cuenta entre otras una historia extractadas de las actas capitulares que dice así, “Cerca de la Puerta del Mar estuvo colocada en el año 1644 una fuente de mármol, con una estatua de Hércules traída desde la Carraca.

Pero miremos el Ayuntamiento que es el edificio que más destaca de la plaza, se empezó a construir en el año 1799 sobre las diferentes bases de antiguas Casas Consistoriales.

De su parte interior destaca el salón de sesiones de estilo isabelino, de su parte exterior las tres plantas y un torre que tiene el edificio. La planta baja es un gran pórtico de arcos de media punta de piedra ostionera. Sobre esta planta descansa un cuerpo central, con una gran balconada posada sobre unas columnas jónicas que dan elegancia al edificio, la remata un frontón triangular decorado con un relieve de “Hércules con el león, el escudo y las columnas”.

Encima tenemos el reloj y la torre con su campana, si miramos detenidamente encontraremos una  similitud que tiene con el faro de Alejandría, la campana fue construida en el año 1614.

Junto al ayuntamiento se encuentra la Iglesia de San Juan de Dios y  junto a su puerta de entrada existe una placa con la siguiente inscripción “La Real Academia Hispanoamericana en el V centenario”, la placa está decorada en su parte superior con la vista más antigua conocida de Cádiz, sacada de un dibujo del año 1513 encontrado en el Archivo General de Simancas, representa la ciudad que conoció Cristóbal Colon cuando estuvo en Cádiz.

El que pueda debe disfrutar con un paseo de esta y otras zonas de la ciudad, solo con las placas conmemorativas se podría hacer una guía de lo que ha sido nuestro Cádiz.

Abrazos para tod@s.









viernes, 23 de junio de 2017

San Lorenzo del Puntal


Mi tercera azotea

Mi tercera azotea se parece a la segunda, pero es tres o cuatro veces más alta.   A sus pies tiene la bahía y por su altura y situación veremos r cosas preciosas e interesantes.  

En primer lugar saludar a la segunda azotea que la tengo a dos palmos de distancia. Las dos forman parte de la búsqueda de la estabilidad familiar  deseada por cualquier persona.

Si mi primera azotea era un encanto de vistas y recuerdos, la segunda fue de esperanza en el mañana y la tercera ha sido de deseos  cumplidos.

Si miras al sur puedes contemplar el tómbolo entre Cádiz y San Fernando. Después de esta última ciudad, le sigue Puerto Real y  al fondo Medina Sidonia, que se ve impresionante en noches claras.

Delante de Puerto Real se puede contemplar el Puente de José León de Carranza, inaugurado el 28.10.1969. Une la Zona Franca de Cádiz con la Factoría de Astillero en la ciudad de Puerto Real.

El servicio que este puente ha dado a la ciudad durante estos cerca de cincuenta años será difícil de cuantificar.

A pocos metros del Puente esta  el barrio de Puntales. Allí se encuentra el Fuerte de San Lorenzo. Desde allí hasta la vecina zona de Matagorda hay un tendido eléctrico con dos torres de  150 metros de altura, construidas por una empresa eléctrica para llevar la corriente eléctrica de un lado a otro de la bahía

Tengo frente a mis ojos el muelle de las Cabezuelas y la Factoría Naval “Astilleros de Puerto Real”. Detrás asoman los pisos construidos en el rio San Pedro y en los  días de mucha claridad se puede observar la silueta de toda la sierra de Cádiz.

 Un alto en el recorrido nos sitúa en el Puente de la Constitución de 1812. Colosal, impresionante, un revulsivo para la bahía, una gran obra pública, un gran motor para el desarrollo de la zona, algo más de 500 millones de Euros en su construcción. Tantas y tantas alabanzas para este puente, que cada uno puede poner o quitar las que quiera. Si la idea era hacer una obra faraónica creo que lo  consiguieron

Dejamos el puente y posamos nuestra vista en el Parque Natural de Los Toruños, la playa y zona residencial de Valdelagrana. A continuación dos grande espigones que nos anuncian la entrada y salida del Rio Guadalete, navegable para ciertos barcos  hasta la ciudad del Puerto de San María.

Un poco más lejos las playas. De la Muralla, del Buzo o Fuentebravia,  por mencionar  alguna de las muchas que existen. En ellas hay urbanizaciones construidas al abrigo de unas espectaculares vistas y puestas de sol.

La vista se nos pierde hasta el faro de Rota, pero volvemos a Cádiz para contemplar desde mi azotea lo que los edificios nos dejen ver de la parte de poniente, la Caleta, el Campo del Sur, la playa de Santa María del Mar o la playa de la Victoria.

Al fondo y después de tantos edificios que me impiden ver las playas o paseos marítimos, se presenta ante mis ojos la vista inmensa del Océano Atlántico, ideal para descansar la vista al atardecer.

Retrocediendo en el tiempo recuerdo que a pocos metros de mi azotea se encuentra el Fuerte de San Lorenzo del Puntal.  Allí se libraron las históricas batallas de la Guerra de la Independencia, al estar instalada en este lugar las baterías de Puntales, que defendían el último rincón de Cádiz, y tener enfrente Matagorda y Trocadero, que estaban ocupadas por los franceses.

Tres azoteas con dos vistas muy diferentes. Intentemos disfrutarlas con los medios disponibles. De momento dejaremos aparcados los drones.

Saludos a tod@s

De manteca colorá me pones cuarto y mitad, 375 gramos. Frase típica de Cádiz que se va perdiendo.











































domingo, 18 de junio de 2017

      Tabaco en rama


Viento de levante

Suena en mis azoteas la sirena que anuncia la entrada de los trabajadores en la Fábrica de Tabacos. Tenemos viento de levante y me llega el inconfundible olor a tabaco. Aún cuando la fábrica fue trasladada a la Zona Franca, el olor seguía llegando a mis azoteas los días de levante. Entonces se decía que estos olores eran malos para el pecho.

Los vientos dominantes en Cádiz son el levante y su inseparable poniente. El levante, conocido popularmente cuando esta fuerte como levantera, suele durar entre siete y diez días. Juntos levante y poniente ocupan la mayoría de los días del año, siendo minoritario el sur y norte.

Este viento trae hasta mi azotea recuerdos de otras épocas mejores, la vida compartida con la Fábrica de Tabacos, autentico motor de riqueza para la clase trabajadora durante muchos años.

En el año 1741 el Rey Felipe V creaba el titulo de Real Fábrica de Tabacos de Cádiz. La elaboración de este producto había comenzado algún tiempo atrás en la ciudad y por esas fechas se fabricaba en un local de la calle Rosario. En el año 1829 se inaugura la fábrica de la calle Plocia, como dijo alguien, santuario de las cigarreras gaditanas. 


Nace un centro de trabajo para muchas mujeres y un impulso económico de gran magnitud para el barrio de Santa María. El nuevo edificio era propiedad del Ayuntamiento hasta el año 1954 que fue vendido a Tabacalera por el alcalde José León de Carranza para poder construir el estadio Carranza. Volvió a ser titularidad del Ayuntamiento en 1985 por una permuta sobre suelo de la Zona Franca que hizo el alcalde Carlos Díaz. Dos formas de entender la política.

En 1999 privatizan Tabacalera Española y comienza el declive de la empresa hasta llegar a nuestros días donde no hay ni rastro de ella. Con fecha del 02.06.2013 Javier Rodríguez escribe en el Diario de Cádiz “Fin a tres siglos de historia”, un artículo muy interesante sobre el tema.

El edificio de la antigua fábrica de la calle Plocia tiene una portada principal con dos cuerpos. En el primero hay una placa de mármol con el nombre “Fabrica Nacional de Tabacos” y encima se conserva el escudo de la primitiva fábrica, en mármol blanco y con la fecha de fundación 1741.En la segunda portada principal se puede contemplar el primer reloj eléctrico de la ciudad.

El interior del edificio es digno de visitar por sus elementos estructurales y decorativos en hierro fundido, sobre todo el gran patio con montera acristalada. En el exterior toma vistosidad una alta chimenea de ladrillo que después de hacer su función cuando el edificio era una fábrica hoy es motivo de decoración.

El viento de levante sigue ahí, pero los olores a hoja o pasta de tabaco que inundaban todo Cádiz han desaparecido. Las historias, mitos y leyendas sobre las cigarreras tienen su origen en las diferentes fábricas que existieron en España. 

Destacan la de Alicante, Cantabria, Cádiz y sobre todo la de Sevilla por las connotaciones religiosas y artísticas que ha tenido. En el Museo de Bellas Artes de Sevilla se puede contemplar un cuadro del artista sevillano Gonzalo Bilbao Martínez fechado en 1915, con el título “Las cigarreras”.

Abrazos para tod@os.

Granada emociona hasta deshacer y fundir todos los sentidos. Henri Matisse, pintor francés.




jueves, 15 de junio de 2017

Corpus Christi Cádiz

Corpus Christi

Es uno de los tres jueves del año que relucen más que el sol, Corpus Christi, pero no suenan las campanas en ningunas de mis azoteas.

Recuerdo que cuando era pequeño preguntaba  ¿Qué santo es hoy?, la respuesta era unánime ¡tal!, hoy la respuesta seria ¡ni idea!.

Son tantos los nombres que se aglomeran en el santoral que es imposible recordarlos a todos, además tenemos que preguntar que día celebramos hoy, el del tabaco, el de la donación de órganos, el del orgullo Friki o el día internacional del niño, por decir unos pocos nada más, me olvido de la festividad de las Comunidades o Municipios.

Todo esto viene a justificar que al acercarme al calendario he visto bien rotulado en rojo el día 15 de junio fiesta del Corpus Christi. Este lo recuerdo por algunas cosas especiales, procesión, desfile de fuerzas armadas, estreno de ropa, olor a romero, cerveza, gambas y corrida de toros.

Entre los años 40 y principio de 60 del pasado siglo, recién terminada la Guerra Civil, la celebración de la fiesta del Corpus estaba muy extendida por toda España, celebrándose en cada lugar de manera diferente.

En Cádiz, me figuro que en otros lugares del sur seria igual, tenían la costumbre de sacar la Custodia,  paso con la Sagrada Eucaristía  en procesión el Jueves de Corpus Christi más bien temprano según la ciudad, antes de que apretara el sol,  después se veía el desfile de todas las fuerzas armadas que habían participado en el cortejo.

Hoy que yo recuerde el Corpus Christi se celebra en su fecha en las localidades de Toledo, Sevilla y Granada, el resto de las ciudades que celebran el Corpus lo han trasladado al siguiente domingo del Corpus.

Si la procesión era multitudinaria, mas lo era la cantidad de militares que la acompañaban o esperaban al final de la misma para rendir honores a la Custodia.

El desfile militar era presenciado por la multitud que había acudido a los actos religiosos, los hombres tenían que alzar su brazo derecho al paso de la bandera nacional. Inculcar al pueblo en lo religioso  y militar, por aquella época era obligatorio, recordemos que hasta el año 1984 el ejército estaba obligado a rendir honores a las imágenes religiosas.

El otro aspecto para el recuerdo es el estreno de ropas, dentro de la escasez económica de las familias, los padres intentaban ese día que sus hijos se pusieran ropa nueva y  que luego le pudieran servir para pasear durante el verano.

Otro hecho  era poder sentarse los padres con los hijos en algún bar donde degustar una vez al año un refresco, cerveza, marisco o pescado frito. Más tarde los que le gustaban y podían acudían a la corrida de toros que se celebraba en el coso existente donde hoy tenemos la plaza Asdrúbal, otros esperaban en las Puertas de Tierra la llegada de los asistente al espectáculo y al mismo tiempo ver si traían a hombros algún torero.

Fueron pasando los años y la juventud opto por aprovechar el día de fiesta para estar en la playa, hasta que la autoridad de turno traslado la fiesta al domingo siguiente, de esa manera los creyente de ese día pueden seguir celebrándolo. 

Abrazos para tod@s

 "Sólo en soledad se siente la sed de la verdad."  Frase de María Zambrano





domingo, 11 de junio de 2017

              



Plaza de la Jara. Iglesia de San Antonio, foto tomada de la web



Caballas caleteras

Caballa,  caballa….. las llevo de a kilo y mayores, vamos niña la caballa fresca y gorda,  caballa, caballa…

En una tarde de verano, con un pequeño aire de poniente y tendido en mi primera azotea, llegaban esas voces de caleteros intentando vender su producto, paraban en cada esquina del recorrido esperando que algún vecino/a acudiera a su invitación.

Tiempos de “caballa asa” con mucho picadillo que se decía, hoy esas caballas caleteras son pocas y caras, degustarlas tiene su precio, los buenos restaurantes tienen su pedido hecho para satisfacer el gusto de sus clientes, el resto de las pescadas se intenta vender como se pueda.

Me asomé al pretil y vi a dos hombres cargando con su  tarima, cubo de agua para refrescar la mercancía  y las pocas caballas que les quedaban, posiblemente se dirijan para su barrio de la Viña.

Al mismo tiempo sonaban las campanas de la Iglesia de San Antonio, desde mi azotea se ven perfectamente las dos torres tan vistosas que tiene la iglesia,  fue edificada sobre la antigua ermita de San Antonio en el Campo de la Jara.

Estando en la plaza de San Antonio podemos recordar algunos de sus edificios más notables. Todo apunta que a partir del año 1656 se empezó a urbanizar esta zona, el barrio del Populo estaba poblado completamente y tenían que buscar otra lugar.

Pensaron que este lado de la ciudad podía ser la zona noble, ya que reunía todo el atractivo para la expansión que necesitaban, terreno y jardines.

Esta zona del campo de la Jara era por aquellos tiempos los extramuros de la ciudad, lo primero que pusieron fue la ermita, cerca se encontraba el pozo de agua dulce que abastecía de agua a la ciudad.

Es una plaza completamente cuadrada ideal para todo tipo de acontecimientos de multitud de personas, ni un solo árbol, ni fuente, ni cualquier otro elemento que pueda entorpecer la estancia de personas o exposición.

Uno de los pozos existentes, parece que fueron tres en la plaza, enviaba agua a la fuente de Hércules en la Plaza de San Juan de Dios para el abastecimiento de los buques allí fondeados.

En uno de sus edificios estuvo ubicado el Café Apolo, célebre en los años de 1800 por las reuniones que tenían en él la clase política.

La plaza la encontramos llena de palacetes de diferentes estilos, la finca con el nº. 1 también es un palacete en este caso construido en 1910 por Juan Cabrera Latorre para el banqueo Aramburu de Mora, siendo sede de la Banca Aramburu Hermanos.

No muy lejos se encuentra el Casino Gaditano, según la Guía de Arquitectura de Cádiz, Casa del marqués del Pedroso, Palacete Isabelino con detalles historicistas, decoración neomudéjar  en el patio, la fachada de Juan de la Vega.

El interior del edificio es una joya arquitectónica. Desde el patio, escalera y corredores. Su construcción llamó mucho la atención por su hermosura, hoy sigue como  punto de reuniones y encuentros de todo tipo. Su preciosa biblioteca contiene un patrimonio documental y bibliográfico  de gran valor como fuente de investigación, se le calculan unos 10.000 volúmenes.

En el nº. 14 se encuentra la “Casa de Pemán”  donde vivió  muchos años el escritor gaditano. Muy cerca está la Entidad Bancaria "Unicaja", en su parte trasera se estableció el “Monte de Piedad de Cádiz” de diferentes recuerdos para muchas familias de Cádiz.

En el nº. 10 hay una placa para recordar que en ese lugar el día 4 de marzo de 1812 se instauró la Lotería Nacional Española.  En plena Guerra de la Independencia el ministro del Consejo y Cámara de Indias, pensó en un medio para aumentar los ingresos públicos, ya que las arcas del estado estaban vacías por la guerra.

El ministro presentó en las Cortes de Cádiz el mismo proyecto que funcionaba en Nueva España, hoy México, sobre Loterías del Estado, le fue aprobado en noviembre del año 1811. 

Desde esa fecha se han celebrado en Cádiz tres sorteos, el 4 de marzo del año 1969 como homenaje al sorteo número 5.000, en 1987 celebrando el 175 aniversario de su creación y por último el 6 de enero del año 2012 conmemorando el bicentenario de la Constitución de 1812.

Como no dedicarle una mañana a esta plaza tan llena de historia, bajaremos de la azotea para sentarnos en uno de estos bancos que rodean la plaza y se la dedicaremos.

Cuando vuelvo a la azotea no hay ni rastro de los caleteros, pero su pregón llega hasta estos días en mi memoria, caballa, de a kilo y mayores, caballas…

Abrazos a Tod@s

No es la edad, sino la actitud lo que nos hace jóvenes. Antonio Gala





miércoles, 7 de junio de 2017

Bohemio
                                                                                                                      

Nueva azotea  

Cada azotea tiene sus propias vistas y la segunda mía no podía ser igual que la primera, ni en sitio ni en vistas. El primer día que subí a ella encontré todo desconocido, la primera en el centro de Cádiz, año de construcción 1790, la segunda en el centro  extramuros, año de construcción 1956, las separan 166 años.

Lo primero que noté fue la falta del lavadero, tampoco tenía poyetes, ni desagüe para el aljibe, el agua llegaba con facilidad al último piso. A nuestro alrededor  podíamos contemplar vistas impensables en la anterior azotea. 

Desde los pretiles que dan al Norte y Levante se podía observar el saco de la bahía, la Escuela de los Flechas Navales o el comienzo del relleno de una parte de la bahía para la construcción de viviendas, hoy Barriada de la Paz.

Los Flechas Navales fueron creados en Cádiz en el año 1938 a instancias de la Delegación Provincial de la Falange Española sección de lo naval a semejanza  de la primera,  que fue inaugurada de Mallorca en 1936, en el año de 1960 termino su actividad en el centro de Cádiz.

Esta escuela náutica estaba asentado sobre la batería que sirvió para la defensa de Cádiz durante la Guerra de la Independencia, llamada Segunda Aguada por ser la “segunda aguada”, lugar desde donde los pozos más próximos surtían de agua a los buques llegados a la bahía.

Asomándome a los pretiles que dan al sur y poniente se veía la fábrica de toneles Ramoneda Hermanos, la estación o apeadero de Renfe, el Cementerio de los Ingleses, un taller para la fabricación y reparación de redes para los barcos pesqueros, las antiguas bodegas  La Cave y Cia.

Desde los primeros años del siglo XX se fue formando un polo industrial en la zona y como consecuencia un gran impulso para  la ciudad, llegando a tener en la Segunda Aguada la fábrica de coches Ford. Esta entre los años de 1920 a 1923 se dedicó al ensamblaje de los llamados Foritos I , entregando terminado una media de 30 coches  diarios. 

Seguimos en esta nueva azotea disfrutando de nuevas vistas, el patio está formado por diferentes bloques de viviendas iguales a este que forman uno común, no se escuchan repiques de campanas, solo existe una iglesia y está un poco separada, la iglesia de San José.

Desde esta azotea iremos viendo muchas historias modernas de Cádiz, historias que nos encantará.

Abrazos para tod@s.


No critiques a tus enemigos, que a lo mejor aprendes.                                               Juan Goytisolo, Descanse en Paz.


sábado, 3 de junio de 2017






    Buganvillas



Olores de patinillos

Pronto se darán a conocer los restaurantes premiados este último año con los galardones otorgados por la Guía Michelin, Repsol o por la Real Academia de Gastronomía.  Algunos de los que optan a estos premios tienen en su poder otros anteriores y los que no las tienen confían en recibirlas.

A mi azotea y desde el patinillo llegaban olores a berzas, pucheros, sopa de tomate, o cualquier guiso ideado por las ama de casa del vecindario comidas que alimentaban, no engordaban y estaban buenísimas.

Además los alimentos utilizados para tal fin, antes había pasado por el control del Estado, no venían del Corte Ingles habían sido adquiridos con mucho trabajo, sudor y horas formando cola delante del economato más cercano, donde tenias que ir con tu cartilla de racionamiento.

En aquellos años donde el hambre y la falta de dinero habían conseguido el empobrecimiento de las clases más humildes, una orden ministerial de 14 de mayo de 1939, estableció el régimen de racionamiento en España para los productos básicos alimenticios y de primera necesidad, como el pan, azúcar, arroz, aceite, leche, carne, etc.

Mientras iban apareciendo enfermedades relacionadas con la falta de nutrición, sobre todo en los más pequeños, los aprovechados de la situación se hacían ricos con las reventas de los artículos de primera necesidad que no podían retirar los de peor situación económica.

Los artículos indicados en la cartilla fueron bajando en calidad mientras que los de mejor calidad se vendían a unos precios desorbitados, los que faltaban en la cartilla eran imposible de encontrar o pagar.

Cuantas veces le echaban agua a la leche para alargar su reparto, lo hacían casi delante de tus ojos, todo bajo la obra caritativa del tendero el cual nos argumentaba que  llegaría para todos los niños, si se formaba algún murmullo, los agentes de la autoriza pronto estaba allí.

Todo esto no me lo ha contado nadie, lo he vivido yo, en las colas de abastecimiento.
Con el aceite ocurría lo mismo lo ligaban con otros de peor calidad para satisfacer la demanda, cuando veías salir el liquido por el repartido no sabias de que se trataba, lo cogías y punto.

La carne ni pensarla, se fue introduciendo en el mercado una carne más barata, la carne caballo y no es porque fura mala de calidad es porque empezaron a dar “gato por Libre”, caballo por vacuno pero al precio de este último.

La cartilla del tabaco era diferente y su distribución se efectuaba en unos establecimientos llamados “Estancos”. Con estas cartillas solo se podía retirar “tabaco de picadura”, el resto era a su precio normal.  Comenzó la picaresca de  las personas que no fumaban se encontraban al retirar su ración con un producto que podían revender a los adictos  que agotan su cupo.

En mayo de 1943 (BOE de 15 de abril de 1943), al mes de la entrada en vigor de la cartilla individual, el número de racionados en España era de  27.071.978 personas. 
El racionamiento perduró oficialmente hasta mayo de 1952, fecha en que desapareció para los productos alimenticios.

Saludos a tod@s

Nadie lo sabe y lo dice:  sólo tú por mi secreto,  ¿Con que llave penetraste por la cárcel de mi sueño?

Coplillas de un secreto de  Pilar Paz Pasamar

Caminante

Caminante Nunca me hubiera yo imaginado escribir 50 blog,perdón, ni uno .Escribir nunca ha sido lo mio , pero saltó esta oportunidad...